La pandemia de COVID-19 comenzó hace algo más de 3 años en Wuhan. Durante todo este tiempo los científicos han vinculado el origen de coronavirus SARS-CoV-2, causante de esta enfermedad, a un animal desconocido. Sin embargo, los últimos informes que maneja la Organización Mundial de la Salud (OMS) la hacen posicionarse a favor de los perros mapache (Nyctereutes procyonoides), una especie de mapache que los comerciales chinos vendían en el mercado de animales vivos de Huanan en Wuhan.

Estos resultados están pendientes de ser publicados próximamente en revistas científicas, una vez superen la revisión por pares. La base científica de estas afirmaciones proviene del análisis genético a muestras obtenidas en el propio mercado al inicio de la pandemia. A partir de ellas los científicos podrían identificar qué animales susceptibles al SARS-CoV-2 se vendían y en qué zonas del mercado. Si hay una correlación, es posible acotar el inicio de la zoonosis.

Estas secuencias genéticas se subieron parcialmente a una base de datos accesible para todo el mundo (llamada GISEAD) a comienzos de año y los científicos empezaron a analizarlas. La OMS está presionando a China para que libere toda la información que tenga al respecto de esas muestras. Al parecer, el Centro de Control de Enfermedades (CDC) de China restringió esta información para permitir nuevas actualizaciones más completas de dichas secuencias.

Debate entre la OMS, GISEAD y China

En opinión de la OMS, esto no sería conclusivo, aunque sí sería capital en cuanto al relato del origen de la pandemia. La organización, evidentemente, lamenta que no se hayan compartido inmediatamente. El propio director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus ha dicho que “debió hacerse hace 3 años”.

Desde China, el científico y virólogo George Gao, profesor en el Instituto de Microbiología de la Academia de Ciencias de China y antiguo líder del CDC chino, ha aclarado que fue GISEAD quien rechazó las secuencias en su momento. Por su parte, un portavoz de GISEAD ha aclarado que ellos no rechazaron las secuencias, que las han requerido y están siendo actualizadas con información nueva como parte de un artículo científico en revisión.

Estamos a las puertas de que se liberen todas las secuencias genéticas crudas, los científicos las analicen y se publique información científicamente veraz sobre este asunto. De esta manera, estamos más cerca de encontrar al animal desde el que ocurrió la más que probable zoonosis al ser humano.